Páginas

miércoles, 26 de septiembre de 2012

EL PRIETO HUMO DE TONTAS HUMORADAS o la Polka que hay que bailar


Declaraciones de Abel Prieto reproducidas por el órgano oficial del PCC

No es verdad que Abel Prieto hace el ridículo por ignorante o ingenuo, no hay casualidad en actos como este.

Decir una mentira de ese tamaño es tan evidente que ni a Pinocho se le hubiera ocurrido.

El Granma acaba de publicar una crónica en la que se describe la participación del ex ministro de Cultura, Abel Prieto, en la tertulia “Miércoles de Sonrisas” que se realiza periódicamente en La Habana, y sus declaraciones han levantado una gran humareda y una gran humorada, fíjense si no: Según Abel, "En los cubanos no hay un solo chiste que aluda a la Revolución, ni a delaciones ni a presos de conciencia, ni a personajes escindidos, más bien apuntan a las carencias o a la emigración de forma benevolente, perdonadora, sin rencor ni hiel".

Según se describe en Diario de Cuba, y a juzgar por los comentarios de los lectores, la noticia se ha regado como incendio de pólvora y ha concitado las más variopintas opiniones, incluso se han recordado algunos de los cuentos populares que contradicen al ex ministro.

Pero todo eso está un poco raro, porque una pieza como él, que mienta de manera tan evidente, y que el órgano oficial del PCC lo haga público, concita mucho más a la suspicacia que a la risa ingenua, irresponsable y displicente.

Abel Prieto ha transitado un larguísimo terreno, minado centímetro a centímetro y a su alrededor se han visto caer viejos robles y jóvenes promesas. A ratos, se han rumorado achaques de “salud” augurándole tiempos tempestuosos; a ratos, también se le ha colocado al centro del conflicto cubano como la posible pieza para equilibrar el tablero.

En el imaginario colectivo, aparece con destellos aquel supuesto o real altercado público que tuvo con el Comandante, si mal no recuerdo en un Congreso de la UNEAC, donde ya lucía su pelo largo, tan fuera de moda que desentonaba. Pero su aureola no se opacó por haberle “torcido el brazo” al Comandante, sino que siguió creciendo, y desde su “trinchera”, como Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) constituyó un gran pilar en el equilibrio social de la isla durante las últimas décadas.

A través de él, se hizo realidad, en el momento preciso, la apertura de una válvula de escape, por la que salió luna buena parte de la enorme presión que se había acumulado en la intelligentzia cubana, producto de los muchos años de dictadura, miserias económicas y que para muchos tuvo en el fusilamiento de Arnaldo Ochoa y tres de sus colaboradores más cercanos, la gota que colmó el vaso. 

La década de los 90´s se inauguró con una gran resaca que necesitaba alguna medicina, había que contrarrestar la amenaza real que representaban las ideas de cientos de intelectuales y artistas desempleados, y aturdidos por las necesidades inauditas que provocó la crisis total, en el mal llamado “período especial”; ideas, que amenazaban con establecer una gran oposición al estatu quo y servir de asidero ideológico a una explosión social, o al menos a un movimiento telúrico que sacara del poder a la clase dominante.

Pero justamente en ese momento y gracias al incondicional apoyo de Abel Prieto, se produjo el más numeroso éxodo de artistas e intelectuales de la Historia de Cuba. Cientos fueron a parar a los cuatro puntos cardinales, y la gran mayoría; hoy, permanecen en un exilio multicolor; hoy, cuando no han encontrado solución los conflictos políticos, sociales y económicos que nacieron en los 60´s y se magnificaron en los 90´s, hay cientos de intelectuales y artistas cubanos que permanecen en la emigración, algunos de ellos apoyan desde lejos al régimen, otros no dicen nada y remesan por obligaciones contractuales con el Ministerio de Cultura, y otros, se manifiestan abiertamente a favor de las libertades ciudadanas y por un cambio radical en el sistema socio-político-económico en Cuba, pero todos están fuera de la isla, todos están fuera del tablero… y casi todos remesan. Esta es la obra del ex ministro de Cultura.

No es verdad que Abel Prieto hace el ridículo por ignorante o ingenuo, no hay casualidad en actos como este. Todos los cubanos, de todas las generaciones conocen cientos de cuentos que demuestran la falsedad de estas declaraciones, cientos de historias que utilizando el humor van directamente contra eso que él llama “revolución”. Decir una mentira de ese tamaño es tan evidente que ni a Pinocho se le hubiera ocurrido.

Al parecer la respuesta hay que encontrarla en la Historia, quizás por eso inmediatamente después de leer la crónica de Granma me vinieron a la mente dos apellidos: Fouché y JrushchovEl primero supo transitar por todas las marañas de la Revolución Francesa, hacerse invisible, ridículo, ignorante e inofensivo para después, cuando le tocó su turno, usar el poder. El segundo, regordete, campesino, rústico, insignificante, capaz de bailar polkas con aquel cuerpo torpe y propicio para hacer reír consiguió que la mirada de Stalin se posara sobre él y que sus amigos y enemigos lo subestimaran lo suficiente como para que ninguno se le presentara como obstáculo en su camino al mando.

Este aparente ridículo que acaba de hacer el ex ministro no debe ser tomado tan a la ligera, un hombre como él no es poca cosa, sobre todo ahora que el hermano menor le pone a menudo la mano sobre el hombro y le escucha, quizás esta sea la polka que Prieto tiene que bailar para que sus amigos y enemigos lo subestimen y le permitan sortear todas las minas que le separan del poder.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Nota: A propósito de los cuentos que según Abel no existen en Cuba, voy a hilar uno de ellos:

Una noche de diciembre, Pepito iba de La Habana a Nueva Paz, y unos pocos kilómetros antes de llegar al pueblo se encontró conque la autopista estaba cerrada y nadie le quería decir lo que estaba sucediendo. Pero Pepito es mucho Pepito y se fue escurriendo hasta que se enteró de que el Comandante acababa de sufrir un aparatoso accidente, y que después de dar muchas vueltas el vehículo en el que iba, cuando la escolta que le seguía en otros vehículos fue a socorrerle, el hombre no estaba. De tal modo que Pepito comenzó una ardua búsqueda. Pero como son las cosas, en la oscuridad de la noche, era casi imposible ver mucho, a pesar de los reflectores de los autos que apuntaban hacia el monte en el que se suponía estaba perdido el Comandante, era muy poco lo que se podía ver entre las malezas.

Pepito se había conseguido una pala, quién sabe dónde, para mejor investigar en aquel monte, que a ratos era cenagoso, pero también tenía isletas de marabú, verdolaga, romerillo y otras hierbas. Y quiso el destino o San Fan Con, que en medio de la intensa búsqueda, Pepito sintiera que una pierna se le quedaba trabada en vaya usted a saber qué cosa. Sería un hueco, un tronco, un perro jibaro que le atrapaba la pierna, pero al mismo tiempo Pepito sintió una voz, como de ultratumba, que decía:

  - Pepito, ayúdame que estoy mal herido.

Pepito miró bien, trato de remover la hierba que obstruía su visión, y descubrió, atorado, en unas arenas movedizas, el rostro del Comandante. Pepito se le acercó con cuidado, miró a todas partes y le dijo al oído:

 - ¿Así que mal herido? No jorobe compadre usted lo que está es mal enterrado -Y comenzó a sepultarlo completamente-.

sábado, 22 de septiembre de 2012

JUAN ARMAS, UN MÚSICO CUBANO EN LOS ALPES SUIZOS


Bailando en la casa del trompo

Hay cubanos en todas partes, los puede uno encontrar al frente de una caravana de camellos en el desierto del Sahara, en la nómina de un Banco en Filipinas, de investigador en un puesto de la NASA en el Polo Norte, en un submarino de cualquier color en el fondo de un océano, de gondolero en Venecia, de maraquero en Suecia, de Concertino de una gran orquesta sinfónica en Londres y -cual bohemios del s. XX y XXI-, en casi todas las academias, orquestas y agrupaciones del mundo, tocando y enseñando música clásica y popular. Pero lo que sí me parece único en su especie es que un cubano aparezca tocando música folklórica DE los Alpes suizos… allí mismo… EN los Alpes suizos… nada de estar fusionando las maracas y el bongó o las lujuriosas síncopas afro cubanas con la música Alpina… nada de eso, sino interpretando folklore suizo al duro y sin guante… vaya, como quien dice: “Bailando en la casa del trompo”… o mejor aun: bailando la suiza en Suiza.

El clarinetista y saxofonista cubano Juan Armas Pizzani, no complacido solo con que la música cubana esté diseminada por el mundo entero, le ha dedicado también parte de su tiempo y talento a tocar música folklórica suiza, y según noticias recientes ha alcanzado, junto a su grupo, altos estándares en el género, lo cual ha sido confirmado con el premio que acaba de ganar en esa especialidad. Su agrupación ha merecido el primer lugar en un prestigioso concurso allá, justo en los Alpes suizos. Una hazaña tan increíble como que un suizo gane en Cuba el Gran Premio de improvisación y controversia en un concurso de punto cubano, de mejor quinto en un concurso de rumba, o de mejor trompeta china en una competencia de congas santiagueras.

Ante una noticia como esta, y teniendo el privilegio de la amistad de este genial músico matancero, no se me pudo ocurrir otra cosa que hacerle una entrevista para El Tren de Yaguaramas y echarla a rodar… y que ruede mientras lectores haya. 

AGS: Ante todo, ¿cuándo y dónde comenzaste a estudiar música?

JAP: Comencé a estudiar la música en 1965 en el conservatorio de Matanzas, mi ciudad natal, con el profesor y director de la Orquesta Sinfónica, Rafael Somavilla Pedroso.

AGS: ¿En qué año matriculaste en la Escuela Nacional de Arte de Cubanacán (ENA) y cuándo y de qué te graduaste?

JAP: Entré en Cubanacán en el año 1968 y me gradué de Instrumentista y Profesor de Clarinete en 1974.

AGS: ¿Cuáles fueron tus primeras experiencias profesionales después de graduado?

JAP: Entre 1974 y 1978 trabajé como profesor de clarinete y saxofón en la Escuela Provincial de Arte y en la Escuela de Superación Profesional de Matanzas. Tocaba con la Orquesta Sinfónica como solista de vez en cuando, y como músico participaba en conciertos, zarzuelas, etc., además integré el Quinteto de Viento de esa institución.

Yo ya había actuado mucho antes, a los 12 años, también como solista con la orquesta, interpretando el Concertino, de Weber. Participé cuando aquello en Festivales Nacionales de Música y en presentaciones de Radio y Televisión. Todo esto fue posible particularmente gracias al apoyo de mi maestro Rafael Somavilla Pedroso, ejemplo como genial profesor, músico, director y gran persona. Él también dirigía la OSM cuando aquello.

Paralelamente a este trabajo profesional asistí a los cursos de superación que impartía el profesor Juan Jorge Junco, quien propuso, en 1977, que fuera yo su asistente en el Instituto Superior de Arte. (ISA)

En 1977 se me concedió la plaza como clarinetista solista de la OSN, cosa que me informó personalmente el desaparecido Maestro Manuel Duchesne Cuzán, entonces Director Titular de la Institución, pero aquella importante oferta no la pude aceptar porque previamente había decidido irme a Europa.

AGS: ¿Cuándo y por qué te fuiste a Europa?

JAP: Fue en 1978, y lo hice porque recibí una beca para hacer estudios superiores en la desaparecida República Democrática Alemana (RDA).

AGS: ¿En cuál escuela o academia te graduaste en Europa y de qué profesión?

JAP: Realicé mis estudios y me gradué de Clarinetista en la Escuela Superior de Música “Hanns Eisler”, de Berlín, en 1983, y después hice dos años de postgrado en la misma escuela.  Allí, estudié el primer año con el profesor D. Kühn y  el resto de los cursos con E. Koch.

AGS: Después de graduado en Berlín ¿Cuál o cuáles fueron los trabajos en los que te desempeñaste y dónde?

JAP: En realidad antes de graduarme reinicié en Alemania la carrera de solista, músico y profesor que había comenzado en Cuba. Participé en varios concursos internacionales en los que obtuve varios premios. Ya desde 1979 integré la Agencia Artística de la RDA, con la que realicé una extensa carrera como artista concertante. Esto permitió que me cursaran invitaciones internacionales de muchas importantes salas de conciertos, y que prestigiosas orquestas me reclamaran para tocar como solista. También fui invitado a impartir Cursos y a participar en Festivales Internacionales; entre ellos, los muy prestigiosos de Bratislava, Gottwaldov y por supuesto  los que se realizaban en la RDA, como por ejemplo el de Weimar.

También me agenciaron presentaciones y grabaciones de radio y televisión; pero además, y muy importante para mi carrera, pude tocar las obras cumbres del repertorio para el clarinete, algunas de las cuales interpreté decenas de veces, lo que es muy común entre pianistas y violinistas, pero es cosa rara entre clarinetistas.

En 1982 comencé a dar clases en la Escuela de Música de Berlín-Lichtenberg, donde, ese mismo año, una de mis alumnas resultó premiada en el Concurso Nacional de Clarinete. Al año siguiente, el profesor E. Koch me propuso como su asistente en la Escuela Superior de Música “Hanns Eisler”, y en el año 1985, cuando el Maestro se retiró, me propuso como su sucesor en el puesto de Profesor de Clarinete.

Entre 1984 y 1985 impartí también clases de clarinete, metodología y construcción de cañas en la Escuela Superior de Música “Franz Liszt”, en Weimar, donde mis alumnos obtuvieron premios significativos y plazas en las orquestas más importantes de Alemania. Por esto, en 1986 también me propuso el Ministerio de Cultura de la RDA la plaza de profesor ordinario en Weimar, pero esta no la acepté.

Sin dudas, nada de esto lo hubiera podido alcanzar sin la confianza que tuvieron en mí algunas personas de muy alto prestigio profesional y académico, además de mi Profesor E. Koch, quienes me apoyaron de manera absoluta. Entre ellos, el profesor D. Zechlin, afamado pedagogo, pianista y rector de la Escuela “Hanns Eisler”, quien fue mi acompañante en muchos conciertos; y también, el profesor O. Koch, quien fuera sucesor de Zechlin en el cargo de Rector en esa misma institución.

Koch, era además Director Titular de la Orquesta Sinfónica Estatal de Halle, y por su conducto fui a tocar muchísimas veces como solista con su orquesta. Sin dudas, estas dos personas, el profesor O. Koch y D. Zechlin, pesaron mucho durante mis años en Alemania y se los debo agradecer.

Muchos de mis alumnos han obtenido muy buenas posiciones como solistas, músicos y profesores. Creo que también mi labor en mi época cubana, es hasta hoy reconocida por muchos ex-alumnos, colegas y amigos artistas.

AGS: ¿Desde cuándo estás en Suiza y a qué te has dedicado en ese país?

JAP: Me mudé aquí en 1988 y me he dedicado principalmente a dar clases de clarinete y otras cosas afines, también acá mis alumnos han ganado varios concursos, tanto en clarinete como en saxofón.

He participado en proyectos de desarrollo de nuevos diseños para instrumentos y ya hay uno que lleva mi nombre, el JAP-Chalumenaux, que desarrolló la firma alemana Aldler-Heinrich Blockflöten Gmbh/ Awaroa. También he participado durante muchos años en proyectos en Montroy-Valencia (www.uamm.org) y a partir de este año en Madrid, en el Chamber Art Madrid (www.chamberartmadrid.es.)

AGS: Ahora quisiera que me contaras en detalles, cómo fue que te iniciaste tocando música folklórica alpina. Puedes abundar en datos musicales porque esta entrevista estoy seguro la leerán muchos de tus colegas y amigos que andan por todo el mundo.

JAP: En 2009 fundé, junto a un grupo de amigos, el grupo Momoll, con la idea de dedicarnos a interpretar la música popular suiza y tratar de aportar elementos nuevos.

Yo he sido el responsable musical de este grupo con el que grabamos un CD en 2010, y con el cual alcanzamos gran popularidad en la Radio y la Televisión, además de hacer conciertos públicos y privados con resonancia en periódicos y revistas. Por eso pudimos ser invitados en agosto pasado al Festival Folklórico Suizo “Stubete am See”, de Zürich, que se realiza en la Sala de los Congresos de la “Tonhalle” de esta cuidad, uno de los centros musicales más importantes de este país, y tuvimos la suerte de obtener el premio “El Cisne de Oro”, por lo cual tú has decidido hacerme esta entrevista.

AGS: Para terminar, cuéntame el significado cultural y artístico de este concurso. Ya me habías comentado en un mensaje privado, con toda modestia, que era un evento de importancia regional y que era interesante solamente para los suizos. Antes de responder, te recuerdo que Suiza tiene un espacio muy respetable en el imaginario universal y no solamente por los relojes y los quesos.

JAP: Yo sé que nuestro país, Suiza -hace muchos años soy suizo, lo mismo que casi toda mi familia, excepto mis dos hijas alemanas-, es un país muy importante en las más diversas ramas del saber, a pesar de ser un país tan pequeño.

Este concurso, que se ha realizado en este festival, tiene el propósito de ampliar la motivación y el interés en el público suizo por nuestro propio folklor, el cual, desdichadamente no es el mejor de Europa.

La pieza original que se escogió para arreglar, es una Polka de un llamado Gehrig, del cual nadie sabe quien fue ni cuando vivió. El objetivo de este festival, llamado de nuevo folklore suizo, es que las composiciones y estilos se desarrollen y popularicen.

Mi alumno y músico del grupo Momoll, Marco Stuhlinger, hizo el arreglo de la versión de nuestro grupo y yo con mi estilo personal cubano-clásico europeo -no se como se le pueda llamar-, he aportado “condimentos” interpretativos clásicos y populares para que suene, y he propiciado que Marco utilice con éxito elementos del son montuno. Visto así, en este caso un suizo ha ganado el concurso cubano de “trompeta china” (risas).

Por supuesto que todo este trabajo se fundamenta en los demás integrantes del grupo. Ellos son, Jörg Stühlinger, quien es el padre de mi alumno Marco, un excelente profesional y director de la escuela primaria “Rietli” en Schöfflisdorf; Stefan Onitsch, quien es maestro en esa misma escuela; y el gran músico y profesor Ueli Moser, ganador de la distinción nacional más importante del género folklórico en este país.

AGS: Ahora a manera de Coda. ¿Qué piensas de la carrera de Juan Armas Pizzani, desde que salió de Matanzas, hasta el día en que le dieron la noticia de que Momoll era el ganador del Cisne de Oro en el festival de nueva música folklórica suiza llamado "Stubete am See"?

JAP: Como yo he vivido muy intensamente toda mi vida y además en diferentes países, con diferentes formas y estructuras sociales, te puedo decir brevemente que nunca pienso en hacer carreras, sino que voy organizando proyectos. Pero en la medida que voy alcanzando la meta, me voy involucrando con nuevos planes. Así, antes de efectuarse el Festival “Stubete am See”, hace casi un mes, ya tenía concebidos nuevos proyectos y uno de ellos, el concurso OSEW 2012 (www.osew.ch) acaba de pasar recientemente. Lo próximo es en noviembre, el Orchester Festival del concurso de Zürich, y después vendrán otros que no te cuento porque todavía no son definitivos.

Como resultado del “Cisne de Oro” y particularmente del concierto que se dio en el Festival “Stubete am See” 2012, ya tenemos algunas nuevas invitaciones para conciertos en diversas salas y, lo más importante, ya somos invitados para el próximo festival “Stubete am See” en  2014.

Importante es aclarar que el premio se obtiene no solamente por el voto del público en internet, sino también por la reacción de los asistentes al concierto y la impresión que de nuestro estilo tuvo la directiva de “Stubete”. Todos estos elementos fueron valorados para que se nos otorgara “El Cisne de Oro”.

En sí, mi única ambición en la vida a sido tocar música lo mejor que pueda, sea popular o clásica y lograr que mis alumnos tengan éxitos. Respecto a hacer carrera, yo veo este premio como un medio para que el grupo reciba más invitaciones a conciertos importantes y menos para mí. Además, como mi alumno Marco  hizo el arreglo, como antes conté, eso es un orgullo doble. Y te repito, el premio más importante y nacional de suiza es “La llave de Oro”. Este premio lo tiene nuestro contrabajista Ueli Moser, que es una de las personalidades de más importancia de la música de los Alpes en la actualidad.

AGS: Y esta pregunta va fuera de programa, es un encore. Por lo general, los autores se refieran al folklor como esa parte de la cultura musical que es trasmitida de generación en generación y sus creadores se desconocen; sin embargo, este concurso es de nueva música folklórica suiza. ¿Me puedes definir este concepto de folklor?

JAP: En si la música folklórica suiza o mas ampliamente, de la región de los Alpes, contiene la misma base que las obras clásicas de Mozart, Haydn, Beethoven, Brahms, Schubert, Mahler etc. Muchos de estos grandes compositores se inspiraron en melodías de los Alpes y crearon obras de gran complejidad artística y estético. Tienes que pensar, que la región de los Alpes abarca a algunos países y regiones: al noroeste de Francia, Suiza, Norte de Italia, Bavaria y Austria. Muchos de los compositores que te he mencionado, vivían en esta región.

En el siglo XIX y XX la atracción de muchos artistas era ir a las montañas de estas regiones, y como Suiza tiene la mayor cantidad de montañas en esta cordillera, pues siempre ha tenido un gran atractivo turístico.

La música folklórica de los Alpes, por muchos años, se podía oír  principalmente en los restaurantes o fiestas de los pueblos. Como en algunas regiones en el invierno los “pasos” estaban cerrados y muchos pueblos también por la mucha nieve, pues esta música era, como también en otros países, el único medio de apoyar los bailes y canciones. Son muchas “mazurkas, polkas etc. (formas que se conocen en la obra de Weber, Chopin etc.) y estas tenían principalmente como instrumentos: el organito suizo –“Schwizer Orgeli”, Hackbret  y muchas veces usaban cucharas para el ritmo.

La nueva línea del folklore en los Alpes, trata de mezclar también elementos de todas las regiones europeas, influencias judías y árabes y ahora conmigo también cubanas. En el CD de Momoll (www.momoll.li) se refleja en nuestro grupo lo que te digo. Lo único que sí me puedo acreditar, es que soy el primer cubano que toca esta música.

AGS: ¿Quisieras agregar algo más?

JAP: Pues esta música a mi me viene como algo muy natural, quiero contarte que yo, entre 1974 y 1977 fui músico y director de comparsas en los carnavales de Matanzas, mi ciudad natal. Cuando aquello, algunos “grandes maestros matanceros” se erizaron porque “el profesor Juan Armas se estaba dedicando a la música de la “chusma”. También en Suiza, hace algunos años, se preocuparon algunos maestros clásicos, y se preguntaban cómo era posible que me dedicara a esta música que ahora me ha propiciado el premio del que estamos hablando.

Pero eso tiene que ver con mis ancestros, porque yo nací en un solar situado en Espíritu Santo número 12, en Pueblo Nuevo, en la ciudad de Matanzas, en el que vivíamos principalmente “blanquitos” excepto mi vecina Camila, una prieta muy buena persona que me dio la leche materna cuando yo nací. Cuando crecí, mi padre me llevaba todos los fines de semana a otro solar, en San Rafael, entre la calzada de Tirry y San Carlos, donde vivían principalmente “prietos”, y allí tuve la oportunidad de tener contacto con la música de nuestro folklore cubano desde muy temprana edad.

AGS: Muchas gracias Maestro por acceder tan amablemente a responder estas preguntas.

JAP: Muchas gracias por tu interés y apoyo.

Enlaces recomendados:

sábado, 15 de septiembre de 2012

AGUACATES GUINNESS EN UN PAISAJE LUNAR



En realidad las dimensiones de este fruto son asombrosas, pues según la nota ha pesado 5 libras y ocho onzas, algo así como un bebé recién nacido.

Un guinness a la depredación y un consejo al consumidor

Cuba, como la isla del Doctor Moreau, es, desde hace poco más de medio siglo, tierra de rarezas: En ella se exhiben y cultivan peces como la Claria Batrachus, una de las 100 especies invasoras más dañinas del mundo, que se arrastra por las riberas de los ríos para depredar cualquier otro ser viviente; pastillas milagrosas como el PPG; sanaciones de enfermedades catastróficas, como la de Hugo Chávez y control de adicciones como las del “Pelusa”; y la más reciente iluminación alimentaria que nos ha llegado de las meditaciones del ex presidente y anciano dictador: la moringa oleífera.

Para elongar la lista de exotismos ahora el diario que se dedica a mantener a los jóvenes de la isla bien informados, ha dado la noticia de un aguacate para el record Guinness. En realidad las dimensiones de este fruto son asombrosas, pues según la nota ha pesado 5 libras y ocho onzas, algo así como un bebé recién nacido.

Pero lo que a mí en particular me llama la atención de esta noticia aguacatera es que el hecho cierto de que las frutas tropicales fueron desaparecidas del mercado cubano y que todas se convirtieron en exóticas por obra y gracia de la incompetencia del sistema no se menciona. En una tierra en la que se daban, como en otra cualquiera del Caribe, los aguacates, los mangos, las papayas, los melones de agua y de castilla, las yucas, el plátano en todas sus variedades, la piña, el caimito, el níspero, la refrescante guanábana, el anón, el marañón, el caimitillo, la granada y toda un larguísima lista de frutas tropicales, hoy por hoy, todas forman parte de una lista de frutas exóticas. Lo que me llama la atención es que los comunicadores para noticiar utilicen las dimensiones del aguacate, cuando en realidad todas las frutas tropicales, grandes, medianas y pequeñas, se volvieron extrañas en Cuba, el privilegio del extrañamiento no le corresponde a este único ejemplar.

Extraño es que, salvado de la depredación de que fueron objeto los árboles frutales cuando la “heroica zafra del 70”, este aguacatero sobreviviera -según dijo el cultivador-, en el patio de su casa desde hace 70 años. Lo extraño es que este sea uno de los pocos de la región, porque siendo Trinidad una zona azucarera, y el aguacatero un árbol que necesita años para dar frutos, muy probablemente sus congéneres quedaron extintos y nunca más se recuperaron.

Esta pudiera ser una prejuiciada especulación mía, pero como una imagen vale por mil palabras, esta que encabeza la publicación del diario oficial cubano no me deja mentir. En ella se pueden ver los anaqueles de lo que aparenta ser una bodega, y allí hay, presumiblemente, unos productos que ni por su forma o empaque pueden ser identificados; sin embargo, lo evidente es que allí no hay ni una sola fruta tropical, lo evidente es que en un paisaje lunar como ese, un aguacatón de cinco libras y ocho onzas viene a ser sin dudas lo más exótico del mundo.

Un consejo al consumidor de moringa:
A propósito de la agresiva comercialización de la moringa que se puede apreciar desde hace algunas semanas en el mercado informal dominicano, anoto, como sana recomendación, un pasaje que ilustra cuán lejos de los alimentos de dudosa procedencia ha estado el “Máximo Líder”, sobre todo de la moringa, del té de hongos, el bisté de cáscara de plátano o la hamburguesa de gofio:  

Frei Betto: Mi madre elogia la cocina cubana, especialmente los productos del mar. El cocinero que es Fidel concuerda:

-Lo mejor es no cocer ni los camarones ni la langosta, pues el hervor del agua reduce sustancia y sabor y endurece un poco la carne. Prefiero asarlos en el horno, o en pincho. Para el camarón bastan cinco minutos al pincho. La langosta once minutos si es al horno, seis minutos al pincho sobre brasa. De aliño, sólo mantequilla, ajo y limón. La buena comida es una comida sencilla. Considero a los cocineros internacionales derrochadores de recursos; un consomé desperdicia gran parte de los subproductos al incluir la cascara de huevo; debe usarse solo la clara, para poder usar después en un pastel u otra cosa la masa de carne y vegetales que quede. Uno de estos cocineros, muy famoso, es cubano. Estuvo preparando no hace mucho pescado al ron y otras mezclas, en ocasión de la visita de una delegación. Lo único que me gustó fue el consomé de tortuga, pero con los desperdicios señalados. Fidel y la religión p. 36 

domingo, 9 de septiembre de 2012

CARTA ABIERTA A CAM


 Con una basta

No tengo la más mínima intención de que Ud. lea esta carta, pero me sumo a lo que parecería ser el último success de la moda para esta temporada. Me da la impresión de que están al grito las epístolas como estilo periodístico-literario -sobre todo si el remitente es un desconocido como yo y el destinatario un escritor famoso como Ud.-, retrotrayéndonos al tiempo de los apóstoles y el de los románticos jóvenes que, como el Werther, verdemente enchalecados depositaban en el papel todo su corazón, y amaban a sus amadas amantes tan desaforadamente, que alguna que otra vez, aburridos de la poca eficacia de sus ruegos epistolares se lanzaban al agua con la intención poco aséptica de encontrar la muerte.

Esta carta que ahora yo escribo, por supuesto no tiene nada que ver ni con amantes suicidas, ni con testimonios bíblicos, sino con la reacción que me provocó leer las diez razones para votar contra Chávez que Ud. ha publicado en su blog. En realidad no fue la primera idea, porque hablando sinceramente la primerita fue escribir un comentario al pié, pero no me pareció suficiente.

Ud. nos ha regalado un paquete de diez razones, que mientras lo leía, me recordó, inevitablemente, los Diez Mandamientos, el Decálogo de Quiroga y el Decamerón –este último de aquel relajado italiano con el que todos, hasta el sol de hoy, nos morimos de la risa-. Ud. nos sirvió una lista de motivos para que los venezolanos voten a favor de cualquier otro candidato a la presidencia de Venezuela menos por Hugo el militar –claramente identificable de aquel otro militar, llamado Alberto, tan provocador de nostalgias infantiles en los cubanos que fueron arrullados con los martianos versos de Los zapaticos de Rosa-.

Así que esta carta, como decía, nada tiene que ver ni con los apóstoles bíblicos o cubanos, ni con el ilustrado Goethe o el jocoso Boccaccio, ni con las modas literarias, sino con un tropel de ideas que su artículo, como ya dije, me ha provocado. Claro, que si uno se pusiera a plasmar ese tropel, pues nada… estaríamos lindando y/o lidiando siempre con el dadá, el surrealismo o interpretando sueños de perros andaluces. Así que lo dicho, estas diez razones suyas me trajeron, con el tropel de marras, la convicción de que tantos motivos no eran necesarios, que existe uno solo y es más que suficiente para que los venezolanos digan no al continuismo, a la prórroga del poder y a la pérdida de la democracia. Y esa razón es 14 años de chavismo. Hugo Chávez ha tenido más tiempo en el poder que cualquier otro presidente democrático en el continente Americano y lo ha empleado en puras digresiones, cantinfladas y torpezas, las que por múltiples razones les son permitidas a los que escriben, pero no a quienes presiden una República.

Esa única razón contiene más de una década de acciones que no dieron al pueblo venezolano una mejor vida, los colocó en el camino de la miseria y la violencia. Estos 14 años de chavismo constituyen la causa más que suficiente para que los venezolanos voten por un cambio en el panorama político de su país y digan sí a la democracia, a la libertad y al progreso.

La única razón para votar a favor del pueblo, es que durante los últimos 14 años, el militar, con sus acciones dantescas, y muy bien cuidado por feroces perros, enganchó un cartel en las puertas del futuro de Venezuela que dice: “abandonad toda esperanza”.

Señor CAM, sin otro asunto que tratar le saludo fraternalmente… y por supuesto, no espero respuesta suya, pero si decide hacerlo será más que bienvenida. Gracias por sus diez razones y los números que las documentan, pero entiendo que con una basta.

Santo Domingo, 09.09.12