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viernes, 28 de agosto de 2015
viernes, 24 de julio de 2015
LA MÚSICA NOS BENEFICIA, PERO NO ES UNA MEDICINA
Ayúdese que ella le ayudará
...es errado pensar que el solo hecho de escuchar o tocar un instrumento provocará efectos placenteros en nuestro espíritu y ejercitará nuestro cerebro como un músculo. Nada de eso, todo depende de la aptitud y la actitud de la persona...
Felizmente, entre tanta
noticia infausta, he podido leer en la prensa cotidiana más de una reseña
acerca de las investigaciones que prueban científicamente los efectos beneficiosos
que provoca la música en la especie humana, estudios que se han realizado con
gran seriedad profesional durante los últimos años en múltiples disciplinas están llegando a oídos de todos, pero en algunos casos han provocado
entusiasmos errados.
Un estudio publicado en la
revista Sicodidáctica, basado en la
práctica que realizan los niños del programa Head Start, en Puerto Rico,
concluyó que “el adiestramiento musical puede suponer una diferencia
significativa en el desarrollo general de los niños, incluido el ámbito del
lenguaje”; y, Nina Kraus y Bharath Chandrasekaran, afirman, en un estudio
publicado en la revista Nature, que
“tocar un instrumento entrena al cerebro a elegir lo que es importante en un
proceso complejo”.
Es ante afirmaciones como
estas que el entusiasmo no debe desbordarse, porque ante todo hay que reconocer
las aptitudes y las actitudes de quienes van a tocar un instrumento. Las
aptitudes musicales tienen que ver con capacidades innatas, entre ellas la
predisposición para escuchar y discriminar sonidos, memorizarlos y repetirlos;
y las actitudes, que tienen que ver con capacidades que se inducen a través de
la educación familiar, entre ellas la curiosidad y los deseos de aprender.
La música no es una medicina,
los resultados de estas investigaciones no quieren decir que un individuo con
problemas de aprendizaje, de conducta o capacidades diferentes cambiará su
condición si le es recetado tocar un instrumento, la música no actúa
independientemente de nuestra actitud y aptitud, no es un antibiótico que nos
mejora si queremos o no, los efectos que provoca la música están determinados
por el modo en que cada individuo o grupo se expone a ella.
La música, incluso una misma
obra, puede provocar efectos muy distintos. Un paciente en una sesión de músico
terapia, un analfabeto musical, un músico profesional o un melómano crítico reaccionan
de maneras muy diferentes ante la misma música, y todo depende del grado de
exposición que tengan ante ese tipo de música.
Estos diferentes grados de
exposición dependen, por supuesto, de la mayor o menor aprehensión que tenga
cada individuo de las leyes estéticas que rigen para el arte musical. Es por
eso que la llamada música académica -por su alto grado de complejidad-, y las
músicas de culturas diferentes a las nuestras –por no formar parte de la banda
sonora de nuestras vidas-, requieren un esfuerzo de cada individuo o grupo para
conocer sus reglas, y será en esa misma medida, de acuerdo al mayor o menor
grado de exposición a estas músicas, que podrán disfrutarla y alcanzar estados
de bienestar espiritual cultos y críticos.
Alejo Carpentier, en su
novela El acoso, nos cuenta los
últimos días en la vida de un perseguido político en época de dictadura. Lo
sitúa en un escondite al que penetran intempestivamente los sonidos de una
música que él describe de manera acrítica, sin conocimientos estéticos, en el
grado más bajo de aprehensión; por lo tanto, sus niveles de disfrute y su
capacidad para hacer diferentes lecturas de la obra son primitivos, su
bienestar espiritual por efectos de esa música, tal como sucede en la vida
real, es muy bajo.
Pero como cada novela debe
tener un antagonista –en este caso estético-, quien hace sonar esa música, en
un gastado disco de pasta, es un melómano, quien vive muy cerca del escondite
del perseguido y trabaja como empleado en el Teatro Auditorium de La Habana.
Este personaje es un conocedor crítico y la obra que escucha es la “Heroica”,
de Ludwig van Beethoven, la ha estado repasando porque la Filarmónica volverá a
tocarla, esta vez dirigida por un nuevo director, y él quiere tenerla fresca en
su memoria para poder hacerse un juicio acerca de la interpretación que
escuchará en vivo esa vez.
Carpentier hace un paralelo excepcional
entre los conocimientos estéticos de uno y otro, describe un ejemplo magnífico
de los diferentes grados de exposición ante la música, nos presenta los efectos
que la misma música puede provocar en individuos con diferentes aptitudes y actitudes.
De tal modo, es errado
pensar que el solo hecho de escuchar o tocar un instrumento provocará efectos
placenteros en nuestro espíritu y ejercitará nuestro cerebro como un músculo.
Nada de eso, todo depende de la aptitud y la actitud de la persona, de su
curiosidad por conocer hasta el último detalle de la obra, conocer la estética,
las épocas, los estilos, distinguir y clasificar los instrumentos, conocer los
compositores y las culturas. Esa es la premisa de la que parten todas las investigaciones
que prueban científicamente los efectos beneficiosos que provoca la música en
la especie humana.
P.E.: Es cierto que en la músico terapia se utilizan los sonidos como medicina; sin embargo, estos tratamientos actúan sobre el inconsciente y por tanto la actividad intelectual de los pacientes no se involucra. En estos casos la música no adquiere las dimensiones de la obra de arte.
P.E.: Es cierto que en la músico terapia se utilizan los sonidos como medicina; sin embargo, estos tratamientos actúan sobre el inconsciente y por tanto la actividad intelectual de los pacientes no se involucra. En estos casos la música no adquiere las dimensiones de la obra de arte.
lunes, 13 de abril de 2015
MARX, KEYNES, LA VII CUMBRE Y LA VIDA COTIDIANA
Muchas veces los expertos se preguntan cómo afectan estos eventos magníficos y magnánimos en la vida doméstica de los individuos, es cierto que a veces se hace difícil, pero esta vez lo vi muy claro, ahí, en el acontecer cotidiano.
La mañana del lunes 13, después de la VII Cumbre de las Américas, me encontré con un vecino en el parqueo del edificio en el que vivo, y como suceden esas conversaciones mañaneras, en una sola ráfaga me contó de que en el fin de semana había tenido dos contratiempos; uno, se le despegó la muela provisional en la que le están trabajando una prótesis fija, o “corona”, como me aclaró; y dos, sus lentes se habían descompuesto. Según me dijo en la misma ráfaga, habían perdido los tornillos de las dos patas. “Vamos como si se hubieran puesto de acuerdo”, concluyó, montó en su carro y se fue.
La mañana del lunes 13, después de la VII Cumbre de las Américas, me encontré con un vecino en el parqueo del edificio en el que vivo, y como suceden esas conversaciones mañaneras, en una sola ráfaga me contó de que en el fin de semana había tenido dos contratiempos; uno, se le despegó la muela provisional en la que le están trabajando una prótesis fija, o “corona”, como me aclaró; y dos, sus lentes se habían descompuesto. Según me dijo en la misma ráfaga, habían perdido los tornillos de las dos patas. “Vamos como si se hubieran puesto de acuerdo”, concluyó, montó en su carro y se fue.
Iba
tan atribulado el vecino, que cuando lo vi regresar justamente dos horas
después, con aquella tranquilidad, no pude menos que preguntarle: “Vecino,
¿pero perdió el viaje?, a lo que con una sonrisa de oreja a oreja me respondió:
“No vecino, no me ve con los lentes puestos”… y ya iba a enseñarme la muela
cuando le corté diciéndole, “pues con su palabra me basta”…
Muchas veces los expertos se preguntan cómo afectan estos eventos magníficos y magnánimos en la vida doméstica de los individuos, es cierto que a veces se hace difícil, pero esta vez lo vi muy claro, ahí, en el acontecer cotidiano. Ante lo que el vecino me contaba y gracias a esas conexiones que a velocidad supersónica hace la mente humana, volví a escuchar los ecos de los discursos encendidos contra el neoliberalismo capitalista echados a volar en la
cumbre, recordé el reconocimiento que hicieron casi todos los Presidentes del modelo populista, del “Socialismo
del siglo XXI” como las vías económicas más convenientes
para nuestro continente, recordé que Cuba y Venezuela se habían
legitimado en esa Cumbre como los modelos a seguir… entonces, le dije al vecino
una frase que lo dejó, al parecer, en China.
-Vecino
–le dije-, que bueno que eso le pasó ahora, porque quizás dentro de dos o tres
años, si le sucede eso, tardará un par de semanas, un par de meses o no podrá
resolverlo nunca si no le mandan los dólares de Nueva York.
-¿Y
cómo así vecino? –Me respondió.
Entonces
no tuve manera de explicarle, en una ráfaga, y le aconsejé leer todos los
discursos de la Cumbre, aunque ahora, cuando escribo esto, me parece que eso
tampoco le ayudará mucho. Entiendo que quien ha nacido en un país al que todos
le reconocemos sus insuficiencias, la pobreza que impera en determinados
sectores de la población, las maldades y la corrupción de los políticos, la
impunidad, el débil Estado de Derecho, la poca fortaleza de las instituciones
del Estado y muchos otros conflictos sociales, políticos y económicos le queda
muy lejos asimilar que se puede estar peor, y que de hecho, muchos, entre ellos
los que viven en Cuba y Venezuela, necesitan trabajar sin descanso para ganar
menos de un dólar diario, y donde para resolver esos dos nimios entuertos
domésticos que en dos horas el pudo resolver, deben pasar “El Niágara en
bicicleta”, y aun así pudieran no resolverlo.
No
quisiera que en un par de años se achante en la silla de alfileres del Palacio
un Presidente populista, aspirante a dictador y seguidor de los modelos del
Socialismo del Siglo XXI, no quisiera que mi vecino, para comprender lo que le
quise decir tenga que vivirlo en carne propia, eso no se lo deseo ni a mi mejor
enemigo.
Primera sesión Plenaria de VII Cumbre de las Américas
domingo, 5 de abril de 2015
¿REVENTAR LA CUMBRE?¿ ESA ES LA CUESTIÓN?
A propósito de la Séptima Cumbre de las Américas que se celebrará en la Ciudad de
Panamá, Panamá, del 10 al 11 de abril de 2015.
...los presidentes que asistirán a esa Cumbre eran unos niños cuando el General que les hablará de tú a tú ya ostentaba todo el poder sobre una nación y capeaba por el mundo creando “dos, tres, muchos Viet Nam”; y eso, al parecer, les ha cautivado.
Quienes
han leído los libros de filosofía marxista recordarán que, para exponer lo
irreconciliable entre el materialismo y el idealismo, casi todos los autores
plantean un axioma: «El problema fundamental de la filosofía es saber qué es lo
primero, el ser o la conciencia». Con esto, queda zanjado todo posible debate
entre creyentes y no creyentes, entre materialistas e idealistas. Cada cual ha
de tener sus razones y todas han de ser «respetables». Por ahí, nada que
debatir.
Pero
este axioma, al ser trasladado mecánicamente al terreno político e ideológico,
también ha servido a las sectas marxistas para sustentar que el problema
fundamental entre el capitalismo y el «comunismo» -el «Socialismo del siglo
XXI» o el que para el castrismo se ha convertido en «Nuestro socialismo»-, está;
en una primera etapa de «luchas», en proclamar dos visiones filosóficas
distintas y «respetables»; y en una segunda etapa, declarar que el comunismo y
el capitalismo son incompatibles, y que para que exista un «mundo de justicia
social» el capitalismo debe extinguirse y esa es la meta de las dictaduras
adscritas a las sectas marxistas, o al menos la ilusión que le colocan a sus
seguidores en el horizonte, esa línea imaginaria que se aleja en la medida en
que nos acercamos a ella.
Y
para esta Séptima Cumbre de las Américas, los países que se han agrupado bajo el
ala del castrismo no han pasado por alto el axioma de marras, como no lo han
tenido en cuenta los países democráticos que, violando sus propios acuerdos,
entre ellos la Carta
Democrática Interamericana, han aupado y aplaudido con ingenuidad y/o
malicia la entrada triunfal de una de las dictaduras más longevas del mundo y
sus seguidores a un foro creado para proteger justamente la democracia
representativa en el continente Americano. Una institución que en uno de sus
documentos dice:
En la Tercera Cumbre de las
Américas de la ciudad de Québec del 2001, los países preocupados por la
fragilidad de algunas democracias propusieron la adopción de la Carta Democrática
Interamericana, que sin lugar a dudas, es el mecanismo más novedoso que
existe en el mundo para defender la democracia. […] La Carta Democrática ha
sido un instrumento esencial que reitera nuestra constante preocupación por
asegurar la subordinación constitucional de todas las autoridades del Estado a
la autoridad civil legítimamente constituida. (*)
El
modo de operar del ex máximo líder de la llamada «revolución cubana» -y de su
sucesor sanguíneo en el poder, el General R. Castro, quien aparecerá como
estrella rutilante en el foro de Panamá-, ha consistido, durante las últimas seis décadas, en destruir las instituciones que no le han sido útiles en su diligente accionar
para mantener en sus manos el poder vitalicio y absoluto, es decir -si tratamos
de hablar el castellano utilizando las categorías creadas partiendo de la
realidad objetiva-, los hermanos Castro han sido capaces de destruir todo lo
que se ha opuesto a su dictadura.
Por
lo tanto, si miramos con algún interés lo sucedido a través de la historia de
las dictaduras, y específicamente de las dictaduras instauradas como sectas marxistas,
y si observamos cómo estas han penetrado y reventado las instituciones
democráticas nacionales e internacionales, será bastante obvio predecir que así
lo harán en esta Séptima Cumbre de las Américas.
Y
para reventar la Cumbre el primero y gigantesco paso ya está dado, y consiste
justamente en permitir que se siente a la mesa, junto a los presidentes
elegidos constitucionalmente, a la dictadura más antiguo del continente
americano, que se legitime de ese modo, se le dé carácter igualitario y respetable
a la dictadura en una institución que se creó para defender las democracias en
el continente, que la Cumbre asuma y dé
pábulo a un sistema sustentado en el poder totalitario, a un sistema que
representa todo lo opuesto a lo proclamado por las Cumbres de las Américas
desde su fundación, y que lejos de condenar a los caudillos los catapulte como
una opción «respetable» de vida para el porvenir de nuestro continente.
Mal
acabarán estas pláticas, como así terminaron con Stalin, con Jruchov, o con
Mao, por solo mencionar a tres de los que, camuflados de demócratas y
proveedores de paz en el mundo, fueron tenidos en cuenta por las potencias
capitalistas y sentados a la mesa como pares. Con cada uno de ellos el
capitalismo sufrió derrotas que aun deberían lamentarse, observarse y
considerarse, derrotas que pudieran repetirse con los populistas totalitarios
que asistirán a esta próxima Cumbre en Panamá, quienes han dado muestras más
que fehacientes de que en sus mentes «el capitalismo está en su fase final y
que desaparecerá de la faz de la tierra junto a la democracia representativa». Para
estos dictadores, y para quienes han usado el sistema democrático para acabar
con la democracia bajo el ala del castrismo, «el futuro pertenece por entero al
socialismo». Ellos están convencido de eso.
Por
otra parte, los presidentes que asistirán a esa Cumbre eran unos niños cuando
el General que les hablará de tú a tú ya ostentaba todo el poder sobre una
nación y capeaba por el mundo creando «dos, tres, muchos Viet Nam»; y eso, al
parecer, les ha cautivado. Aparentemente, no se han podido resistir ni
demócratas, ni autoritarios populistas ante el deseo de ver en vivo, sentado a
su mesa, a quien algunos quisieran encarnar, y, tomados así, en éxtasis, tanto
los desprevenidos como los cautos, recibir de él la fórmula del poder vitalicio,
con la cual se reventará, antes sus ojos, la Séptima Cumbre de las Américas.
Ojalá que me equivoque. Ojalá.
miércoles, 18 de marzo de 2015
LOS CAMBIOS EN LA DOCUMENTADA HISTORIA DE CUBA
Los cambios en Cuba
A pesar de todo lo escrito durante más de medio siglo, el artículo de Wikipedia introduce un cambio en la Historia Documentada -tal como se cambiaba lo escrito por los cerdos en Rebelión en la Granja, de Orwell, ¿lo recuerdan?-
No tengo la
menor duda de que la Historia de Cuba, desde 1959 hasta el día en que lo inexorable
suceda, habrá que reescribirla punto por punto, quitando lo no documentado y la
propaganda, y sumando los documentos que por fuerza no podrán hacer desaparecer,
tal como ha sucedido en otras culturas, incluso miles de años después de que
aquellas hubieran desaparecido.
Dentro de
ese mar propagandístico, ajustado con remaches ideológicos, uno se encuentra infinidad
de páginas con aparente rigor académico que incluyen, no por falta de conocimientos,
sino por necesidad sistémica, afirmaciones que no se atienen a la realidad
documentada. Así, en un artículo que aparece en Wikipedia bajo el título: Relaciones
diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos se podía leer, hasta el 18 de
marzo de 2015, lo siguiente:
Entre el 15 y el 26 de abril de 1959, Castro y una delegación de
representantes visitaron los EE.UU. como invitados de la Asociación de la
Prensa, donde declaró, sin titubeos, su postura comunista y de apoyo a la Unión
Soviética y otros países de Europa del Este.
Cuando lo
cierto y muy bien documentado es que Fidel Castro nunca declaró su filiación
comunista hasta el 16 de abril de 1961, cuando en un aparente juego de palabras
y ante una multitud de milicianos enardecidos, dijo que: "No pueden
perdonarnos que hayamos hecho una revolución socialista en las propias narices
de los Estados Unidos".
A pesar de todo lo
escrito durante más de medio siglo, el artículo de Wikipedia introduce
un cambio en la Historia Documentada -tal como se cambiaba lo escrito por los
cerdos en Rebelión en la Granja, de
Orwell, ¿lo recuerdan?-, así que como el medio da la oportunidad de corregir
los trabajos que aparecen en sus páginas siempre que se citen las fuentes, he
hecho uso de esa libertad que da el medio para sustituir las líneas antes
citadas por lo que sigue:
…donde declaró, sin titubeos, que no era comunista, como lo
había declarado el día 13 de enero de 1959 en una entrevista que le hicieran en
el Club de Leones de La Habana (Cuadernos de Historia Habanera 66. Discursos
del Dr. Fidel Castro Ruz Comandante en Jefe del Ejército Rebelde 26 de julio y
Primer Ministro del Gobierno Revolucionario. Oficina del Historiador de la
Ciudad de La Habana. 1959 Pág. 119) y el 15 de enero en el Club Rotario (Ídem.
Pág. 135) y ante las cámaras en más de una ocasión como se puede apreciar en el
siguiente vídeo:
Si alguien
tiene otros datos que se puedan documentar para corregir otros gazapos en este artículo de Wikipedia, pues
haga uso de su libertad y pase por la página e incorpórelos.
martes, 17 de febrero de 2015
CASTRO-USA Y LOS CABALLEROS DE LA MESA REDONDA
Los cambios en Cuba
A dos meses del anuncio, por el que más de un amigo me felicitó creyendo que “ahora sí mi país iba a cambiar de verdad”, mi respuesta sigue siendo la misma: Este es otro episodio, otra jugada de tiempo, un cambio aparente –cambio fraude como le llamó Payá Sardiñas- para no abandonar el poder vitalicio y sobre todo, para mantenerse con vida.
Ya
pasaron dos meses de aquel anuncio de la normalización de relaciones entre el General
y el Presidente de los Estados Unidos; sin embargo, nada nuevo aparece sobre el
horizonte, y sigue siendo el intercambio de prisioneros el único y efectivo resultado
de aquellos discursos que llenaron a todos de asombro y dudas.
Toneladas
de tinta se han vertido sobre el papel y millones de mensajes y artículos se
han publicado en las redes, muchas especulaciones, muchas predicciones, pero más
allá del “triunfo” obtenido por los hnos. de Birán con la excarcelación de sus
espía y el uso que de ellos está haciendo en la continuación de una larga y
efectiva campaña propagandística y proselitista, no se ve nada claro.
Algunos
caballeros, por ingenuidad o porque así lo creen de manera entrañable, han
vaticinado que con la normalización de las relaciones con la dictadura, esta se
ablandará y dejará de violar los derechos humanos. También se extiende el
criterio de que no resultó el embargo y ese es motivo más que suficiente para eliminarlo
dándole a la “pequeña empresa privada” más posibilidades de desarrollo… y
muchas otras conclusiones que no comparto.
Y no
comparto esos criterios que se debaten entre el optimismo y el triunfalismo
porque, por lo general, las cosas son más simples de lo que aparentan, porque
nadie es lo suficientemente tonto como para cometer errores sin que esté
absolutamente presionado para cometerlos, sin opción para actuar de otra manera
y este no es el caso de los hermanos de Birán y su prole que ya va ascendiendo
al poder.
En
los centros del poder en Cuba no hay la más mínima presión para cambiar nada, y
por supuesto que lo que funciona no se cambia, y no se cambiará nada porque ha
funcionado, no se cambiará nada porque en la mesa donde se juegan las cartas
del poder sobre la isla quien reparte sigue siendo la misma mano y los demás
caballeros deben acatar las cartas que le tocan, nadie en esta mesa ha puesto
nada que obligue al cambio.
A
dos meses del anuncio, por el que más de un amigo me felicitó creyendo que “ahora
sí mi país iba a cambiar de verdad”, mi respuesta sigue siendo la misma: Este
es otro episodio, otra jugada de tiempo, un cambio aparente –cambio fraude como
le llamó Payá Sardiñas- para no abandonar el poder vitalicio y sobre todo, para
mantenerse con vida.
Estas
son, en mi criterio, las dos sencillas razones: mantener el poder y la vida. Dos
razones más que suficientes como para no cambiar la mano y continuar
embaucando, blofeando y prestidigitando ante los ojos de los caballeros de la
mesa.
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