Bailando en la casa del
trompo
Hay cubanos en todas partes,
los puede uno encontrar al frente de una caravana de camellos en el desierto
del Sahara, en la nómina de un Banco en Filipinas, de investigador en un puesto
de la NASA en el Polo Norte, en un submarino de cualquier color en el fondo de
un océano, de gondolero en Venecia, de maraquero en Suecia, de Concertino de
una gran orquesta sinfónica en Londres y -cual bohemios del s. XX y XXI-, en
casi todas las academias, orquestas y agrupaciones del mundo, tocando y
enseñando música clásica y popular. Pero lo que sí me parece único en su
especie es que un cubano aparezca tocando música folklórica DE los Alpes suizos… allí mismo… EN los Alpes suizos… nada de estar fusionando las
maracas y el bongó o las lujuriosas síncopas afro cubanas con la música Alpina…
nada de eso, sino interpretando folklore suizo al duro y sin guante… vaya, como
quien dice: “Bailando en la casa del trompo”… o mejor aun: bailando la suiza en
Suiza.
El clarinetista y
saxofonista cubano Juan Armas Pizzani, no complacido solo con que la música cubana esté diseminada por
el mundo entero, le ha dedicado también parte de su tiempo y talento a tocar
música folklórica suiza, y según noticias recientes ha alcanzado, junto a su
grupo, altos estándares en el género, lo cual ha sido confirmado con el premio
que acaba de ganar en esa especialidad. Su agrupación ha merecido el primer
lugar en un prestigioso concurso allá, justo en los Alpes suizos. Una hazaña
tan increíble como que un suizo gane en Cuba el Gran Premio de improvisación y
controversia en un concurso de punto cubano, de mejor quinto en un concurso de
rumba, o de mejor trompeta china en una competencia de congas santiagueras.
Ante una noticia como esta,
y teniendo el privilegio de la amistad de este genial músico matancero, no se
me pudo ocurrir otra cosa que hacerle una entrevista para El Tren de Yaguaramas y echarla a rodar… y que ruede mientras
lectores haya.
AGS: Ante todo, ¿cuándo y
dónde comenzaste a estudiar música?
JAP: Comencé a estudiar la música en 1965 en el conservatorio de
Matanzas, mi ciudad natal, con el profesor y director de la Orquesta Sinfónica,
Rafael Somavilla Pedroso.
AGS: ¿En qué año
matriculaste en la Escuela Nacional de Arte de Cubanacán (ENA) y cuándo y de qué te graduaste?
JAP: Entré en
Cubanacán en el año 1968 y me gradué de Instrumentista y Profesor de Clarinete
en 1974.
AGS: ¿Cuáles fueron tus
primeras experiencias profesionales después de graduado?
JAP: Entre 1974 y 1978 trabajé como profesor de clarinete
y saxofón en la Escuela Provincial de Arte y en la Escuela de Superación
Profesional de Matanzas. Tocaba con la Orquesta Sinfónica como solista de vez
en cuando, y como músico participaba en conciertos, zarzuelas, etc., además
integré el Quinteto de Viento de esa institución.
Yo ya había actuado mucho antes, a los 12 años, también
como solista con la orquesta, interpretando el Concertino, de Weber. Participé cuando aquello en Festivales
Nacionales de Música y en presentaciones de Radio y Televisión. Todo esto fue
posible particularmente gracias al apoyo de mi maestro Rafael Somavilla
Pedroso, ejemplo como genial profesor, músico, director y gran persona. Él
también dirigía la OSM cuando aquello.
Paralelamente a este trabajo profesional asistí a los
cursos de superación que impartía el profesor Juan Jorge Junco, quien propuso,
en 1977, que fuera yo su asistente en el Instituto Superior de Arte. (ISA)
En 1977 se me concedió la plaza como clarinetista solista
de la OSN, cosa que me informó personalmente el desaparecido Maestro Manuel
Duchesne Cuzán, entonces Director Titular de la Institución, pero aquella
importante oferta no la pude aceptar porque previamente había decidido irme a
Europa.
AGS: ¿Cuándo y por qué te
fuiste a Europa?
JAP: Fue en 1978, y lo hice porque recibí una beca para hacer estudios superiores
en la desaparecida República Democrática Alemana (RDA).
AGS: ¿En cuál escuela o
academia te graduaste en Europa y de qué profesión?
JAP: Realicé mis estudios y me gradué de Clarinetista en la Escuela Superior
de Música “Hanns Eisler”, de Berlín, en 1983, y después hice dos años de
postgrado en la misma escuela. Allí,
estudié el primer año con el profesor D. Kühn y
el resto de los cursos con E. Koch.
AGS: Después de graduado en
Berlín ¿Cuál o cuáles fueron los trabajos en los que te desempeñaste y dónde?
JAP: En realidad antes de
graduarme reinicié en Alemania la carrera de solista, músico y profesor que
había comenzado en Cuba. Participé en varios concursos internacionales en los
que obtuve varios premios. Ya desde 1979 integré la
Agencia Artística de la RDA, con la que realicé una extensa carrera como
artista concertante. Esto permitió que me cursaran invitaciones internacionales
de muchas importantes salas de conciertos, y que prestigiosas orquestas me
reclamaran para tocar como solista. También fui invitado a impartir Cursos y a participar
en Festivales Internacionales; entre ellos, los muy prestigiosos de Bratislava,
Gottwaldov y por supuesto los que se
realizaban en la RDA, como por ejemplo el de Weimar.
También me agenciaron presentaciones
y grabaciones de radio y televisión; pero además, y muy importante para mi
carrera, pude tocar las obras cumbres del repertorio para el clarinete, algunas
de las cuales interpreté decenas de veces, lo que es muy común entre pianistas
y violinistas, pero es cosa rara entre clarinetistas.
En 1982 comencé a dar clases
en la Escuela de Música de Berlín-Lichtenberg, donde, ese mismo año, una de mis
alumnas resultó premiada en el Concurso Nacional de Clarinete. Al año siguiente, el profesor E. Koch me propuso como su
asistente en la Escuela Superior de Música “Hanns Eisler”, y en el año 1985,
cuando el Maestro se retiró, me propuso como su sucesor en el puesto de
Profesor de Clarinete.
Entre 1984 y 1985 impartí
también clases de clarinete, metodología y construcción de cañas en la Escuela
Superior de Música “Franz Liszt”, en Weimar, donde mis alumnos obtuvieron
premios significativos y plazas en las orquestas más importantes de Alemania.
Por esto, en 1986 también me propuso el Ministerio de Cultura de la RDA la
plaza de profesor ordinario en Weimar, pero esta no la acepté.
Sin dudas, nada de esto lo
hubiera podido alcanzar sin la confianza que tuvieron en mí algunas personas de
muy alto prestigio profesional y académico, además de mi Profesor E. Koch,
quienes me apoyaron de manera absoluta. Entre ellos, el profesor D. Zechlin,
afamado pedagogo, pianista y rector de la Escuela “Hanns Eisler”, quien fue mi
acompañante en muchos conciertos; y también, el profesor O. Koch, quien fuera
sucesor de Zechlin en el cargo de Rector en esa misma institución.
Koch, era además Director
Titular de la Orquesta Sinfónica Estatal de Halle, y por su conducto fui a
tocar muchísimas veces como solista con su orquesta. Sin dudas, estas dos personas,
el profesor O. Koch y D. Zechlin, pesaron mucho durante mis años en Alemania y
se los debo agradecer.
Muchos de mis alumnos han
obtenido muy buenas posiciones como solistas, músicos y profesores. Creo que
también mi labor en mi época cubana, es hasta hoy reconocida por muchos ex-alumnos,
colegas y amigos artistas.
AGS: ¿Desde cuándo estás en
Suiza y a qué te has dedicado en ese país?
JAP: Me mudé aquí en 1988 y me he dedicado principalmente a dar clases de
clarinete y otras cosas afines, también acá mis alumnos han ganado varios concursos,
tanto en clarinete como en saxofón.
He participado en proyectos
de desarrollo de nuevos diseños para instrumentos y ya hay uno que lleva mi
nombre, el JAP-Chalumenaux, que desarrolló la firma alemana Aldler-Heinrich
Blockflöten Gmbh/ Awaroa. También he participado durante muchos años en
proyectos en Montroy-Valencia (www.uamm.org) y
a partir de este año en Madrid, en el Chamber Art Madrid (www.chamberartmadrid.es.)
AGS: Ahora quisiera que me
contaras en detalles, cómo fue que te iniciaste tocando música folklórica
alpina. Puedes abundar en datos musicales porque esta entrevista estoy seguro
la leerán muchos de tus colegas y amigos que andan por todo el mundo.
JAP: En 2009 fundé, junto a
un grupo de amigos, el grupo Momoll, con la idea de dedicarnos a interpretar la
música popular suiza y tratar de aportar elementos nuevos.
Yo he sido el responsable
musical de este grupo con el que grabamos un CD en 2010, y con el cual alcanzamos
gran popularidad en la Radio y la Televisión, además de hacer conciertos
públicos y privados con resonancia en periódicos y revistas. Por eso pudimos ser
invitados en agosto pasado al Festival Folklórico Suizo “Stubete am See”, de
Zürich, que se realiza en la Sala de los Congresos de la “Tonhalle” de esta
cuidad, uno de los centros musicales más importantes de este país, y tuvimos la
suerte de obtener el premio “El Cisne de Oro”, por lo cual tú has decidido
hacerme esta entrevista.
AGS: Para terminar, cuéntame
el significado cultural y artístico de este concurso. Ya me habías comentado en
un mensaje privado, con toda modestia, que era un evento de importancia
regional y que era interesante solamente para los suizos. Antes de responder,
te recuerdo que Suiza tiene un espacio muy respetable en el imaginario
universal y no solamente por los relojes y los quesos.
JAP: Yo sé que nuestro país,
Suiza -hace muchos años soy suizo, lo mismo que casi toda mi familia, excepto
mis dos hijas alemanas-, es un país muy importante en las más diversas ramas del
saber, a pesar de ser un país tan pequeño.
Este concurso, que se ha
realizado en este festival, tiene el propósito de ampliar la motivación y el
interés en el público suizo por nuestro propio folklor, el cual, desdichadamente
no es el mejor de Europa.
La pieza original que se
escogió para arreglar, es una Polka de un llamado Gehrig, del cual nadie sabe
quien fue ni cuando vivió. El objetivo de este festival, llamado de nuevo
folklore suizo, es que las composiciones y estilos se desarrollen y
popularicen.
Mi alumno y músico del grupo
Momoll, Marco Stuhlinger, hizo el arreglo de la versión de nuestro grupo y yo
con mi estilo personal cubano-clásico europeo -no se como se le pueda llamar-,
he aportado “condimentos” interpretativos clásicos y populares para que suene,
y he propiciado que Marco utilice con éxito elementos del son montuno. Visto
así, en este caso un suizo ha ganado el concurso cubano de “trompeta china”
(risas).
Por supuesto que todo este
trabajo se fundamenta en los demás integrantes del grupo. Ellos son, Jörg
Stühlinger, quien es el padre de mi alumno Marco, un excelente profesional y director
de la escuela primaria “Rietli” en Schöfflisdorf; Stefan Onitsch, quien es
maestro en esa misma escuela; y el gran músico y profesor Ueli Moser, ganador
de la distinción nacional más importante del género folklórico en este país.
AGS: Ahora a manera de Coda.
¿Qué piensas de la carrera de Juan Armas Pizzani, desde que salió de Matanzas,
hasta el día en que le dieron la noticia de que Momoll era el ganador del Cisne
de Oro en el festival de nueva
música folklórica suiza llamado "Stubete am See"?
JAP: Como yo he vivido muy
intensamente toda mi vida y además en diferentes países, con diferentes formas
y estructuras sociales, te puedo decir brevemente que nunca pienso en hacer
carreras, sino que voy organizando proyectos. Pero en la medida que voy
alcanzando la meta, me voy involucrando con nuevos planes. Así, antes de
efectuarse el Festival “Stubete am See”, hace casi un mes, ya tenía concebidos
nuevos proyectos y uno de ellos, el concurso OSEW 2012 (www.osew.ch) acaba de pasar
recientemente. Lo próximo es en noviembre, el Orchester Festival del concurso
de Zürich, y después vendrán otros que no te cuento porque todavía no son
definitivos.
Como resultado del “Cisne de
Oro” y particularmente del concierto que se dio en el Festival “Stubete am See”
2012, ya tenemos algunas nuevas invitaciones para conciertos en diversas salas
y, lo más importante, ya somos invitados para el próximo festival “Stubete am
See” en 2014.
Importante es aclarar que el
premio se obtiene no solamente por el voto del público en internet, sino
también por la reacción de los asistentes al concierto y la impresión que de
nuestro estilo tuvo la directiva de “Stubete”. Todos estos elementos fueron
valorados para que se nos otorgara “El Cisne de Oro”.
En sí, mi única ambición en
la vida a sido tocar música lo mejor que pueda, sea popular o clásica y lograr
que mis alumnos tengan éxitos. Respecto a hacer carrera, yo veo este premio como
un medio para que el grupo reciba más invitaciones a conciertos importantes y
menos para mí. Además, como mi alumno Marco
hizo el arreglo, como antes conté, eso es un orgullo doble. Y te repito,
el premio más importante y nacional de suiza es “La llave de Oro”. Este premio
lo tiene nuestro contrabajista Ueli Moser, que es una de las personalidades de
más importancia de la música de los Alpes en la actualidad.
AGS: Y esta pregunta va fuera de programa, es un encore. Por lo general, los autores se
refieran al folklor como esa parte de la cultura musical que es trasmitida de
generación en generación y sus creadores se desconocen; sin embargo, este
concurso es de nueva música folklórica suiza. ¿Me puedes definir este concepto
de folklor?
JAP: En si la música folklórica
suiza o mas ampliamente, de la región de los Alpes, contiene la misma base que las
obras clásicas de Mozart, Haydn, Beethoven, Brahms, Schubert, Mahler etc.
Muchos de estos grandes compositores se inspiraron en melodías de los Alpes y
crearon obras de gran complejidad artística y estético. Tienes que pensar, que
la región de los Alpes abarca a algunos países y regiones: al noroeste de
Francia, Suiza, Norte de Italia, Bavaria y Austria. Muchos de los compositores
que te he mencionado, vivían en esta región.
En el siglo XIX y XX la
atracción de muchos artistas era ir a las montañas de estas regiones, y como
Suiza tiene la mayor cantidad de montañas en esta cordillera, pues siempre ha
tenido un gran atractivo turístico.
La música folklórica de los
Alpes, por muchos años, se podía oír
principalmente en los restaurantes o fiestas de los pueblos. Como en
algunas regiones en el invierno los “pasos” estaban cerrados y muchos pueblos
también por la mucha nieve, pues esta música era, como también en otros países,
el único medio de apoyar los bailes y canciones. Son muchas “mazurkas, polkas
etc. (formas que se conocen en la obra de Weber, Chopin etc.) y estas tenían
principalmente como instrumentos: el organito suizo –“Schwizer Orgeli”,
Hackbret y muchas veces usaban cucharas
para el ritmo.
La nueva línea del folklore
en los Alpes, trata de mezclar también elementos de todas las regiones
europeas, influencias judías y árabes y ahora conmigo también cubanas. En el CD
de Momoll (www.momoll.li) se
refleja en nuestro grupo lo que te digo. Lo único que sí me puedo acreditar, es
que soy el primer cubano que toca esta música.
AGS: ¿Quisieras agregar algo más?
JAP: Pues esta música a mi me viene como algo muy natural, quiero
contarte que yo, entre 1974 y 1977 fui músico y director de comparsas
en los carnavales de Matanzas, mi ciudad natal. Cuando aquello, algunos
“grandes maestros matanceros” se erizaron porque “el profesor Juan Armas se
estaba dedicando a la música de la “chusma”. También en Suiza, hace algunos
años, se preocuparon algunos maestros clásicos, y se preguntaban cómo era
posible que me dedicara a esta música que ahora me ha propiciado el premio del
que estamos hablando.
Pero eso tiene que ver con
mis ancestros, porque yo nací en un solar situado en Espíritu Santo número 12,
en Pueblo Nuevo, en la ciudad de Matanzas, en el que vivíamos principalmente
“blanquitos” excepto mi vecina Camila, una prieta muy buena persona que me dio
la leche materna cuando yo nací. Cuando crecí, mi padre me llevaba todos los
fines de semana a otro solar, en San Rafael, entre la calzada de Tirry y San
Carlos, donde vivían principalmente “prietos”, y allí tuve la oportunidad de
tener contacto con la música de nuestro folklore cubano desde muy temprana edad.
AGS: Muchas gracias Maestro por acceder tan amablemente a
responder estas preguntas.
JAP: Muchas gracias por tu
interés y apoyo.
Enlaces recomendados: